El monje que vendió su Ferrari cap3

El monje que vendió su Ferrari

III.-la milagrosa transformación de Julien Mantle

John no salía de su asombro por lo que había visto en Julián. Quien le dijo que el mundo competitivo de la abogacía había cobrado su8 precio, no solo físicamente sino de forma espiritual, al igual que su cuerpo se venia abajo, su mente había perdido brillo. La presión constante había destruido su más importante cualidad “su espíritu”. El medico le planteo renunciar a la abogacía o a la vida, y el decidió reavivar el fuego que había en su interior cuando era joven.

Se entusiasmo al explicar como vendido todo y partió a la india para conocer su cultura ancestral y tradición mística. Viajo de aldea en aldea aprendiendo nuevas costumbres contemplando paisajes eternos y amando cada vez más a aquel pueblo que irradiaba calidez, bondad y una perspectiva del verdadero significado de la vida. Incluso los más desposeídos abrían su casa y corazo. A medida que el tiempo pasaba Julián empezó a sentirse nuevamente vivo y recuperó su curiosidad innata  y su chispa creativa, así como sus ganas de vivir y empezó a sentirse más cordial y sereno. Y recupero algo mas: “la risa”

John le pregunto “¿te costo dejar todo?” y le contesto “en realidad fue fácil, aprendí que la verdadera generosidad para el futuro consiste en entregarlo todo al presente.

El primer paso real llego cuando llevaba 7 meses en india en cachemira, conoció al yogui krishnan que también fue abogado que también renuncio a todo y aprendió que todo sucede por alguna razón, el fracaso es necesario para la expansión de la persona. Nunca lamentes el pasado y le pido construir su vida y el lo mandó a buscar a unos sabios, los grandes sabios de Sivana en los Himalayas. Después de 7 días de caminata encontró a uno que vestía una tunica roja coronada por una capucha azul y le pidió ayuda, el traía una colección de flores hermosas, el monje le dijo “mis hermanos te recibirán con lo brazos abiertos pero le dijo “cuando hayas aprendido las verdades eternas deberás regresar  a tu país y hacer participes a quienes la necesitan” 

Julián se debió sentir vacío por que buscaba por tierras desconocidas y distantes, pero perdido encontró la entrada  y una ayuda para las respuestas que el estaba buscando.